El Baúl del Consuelo.

¿De qué se trata? La valentía en ocasiones te lleva a vencer los obstáculos del miedo, mientras que la angustia te va convirtiendo en tu piedra de tropiezo. ¿Dónde dejas tus fuerzas, a quién entregas tus ganas, donde refugias tus sueños? cada aliento que te lleva a luchar, cada fuego que te alienta a caminar, esos motivos que te llevaron a realizar grandes cosas, esos que te hicieron feliz... ¡no los dejes escapar! al contrario, llena tu vida de ellos, conservalos puros en el baúl del consuelo, para que en ese momento en el que las lágrimas te roben el aliento, siempre  tengas guardado en tu corazón un buen recuerdo de tu esfuerzo, recuerda que las armas que son dadas de lo alto jamas se alejaran de ti, tan sólo debes aprender a utilizarlas, encontrando el momento perfecto para llevarlas a batalla. No son tus triunfos los que te hacen un héroe, son las batallas las que te hacen más fuerte.

La Cicatriz.

Centímetros de distancia me separan de la calma, tan sólo logro ver la fantasía de un sueño que hizo nacer mi alegría, mientras que mis pasos observan un pasado turbio que me condujo hacia un presente desconocido, en donde soñar se convierte en el mejor remedio para olvidar y encontrar motivos para seguir y luchar por curar heridas de recuerdos sinceros y llenos de ilusión, donde la inocencia acariciaba mis oídos y en cada latido escuchaba la melodía mas hermosa llamada: felicidad. Hoy que solo escucho un sinfín de reproches por cada error cometido entiendo la importancia de cada tropiezo y logro comprender así que era irrelevante tanto la razón por la cual tuve que caer como el aliento que ayudo a levantarme, lo que realmente importa es la cicatriz, esa cicatriz que te da la experiencia, la cicatriz que te muestra el coraje que tuviste al superar cada obstáculo, la cicatriz que un día fue herida y te hizo llorar, hoy te hace recordar cada prueba que pudiste soportar y te muestra que hay otros senderos por los cuales caminar y que si tienes el valor siempre podrás volver a comenzar.

Esperar.

Pétalos caen, los recuerdos quedan. La sequía pasa dejando un rastro inmensurable, las palabras se tornan sin sentido, la burbuja esta por estallar y la angustia se vuelve cada vez mas dócil ante los miedos y la oscuridad; la voz que se escuchaba en la penumbra va conociendo el silencio de mis pasos  que van desgarrando lágrimas en medio del desierto, mientras que la alegría se escapa de mis manos, descubro la incertidumbre rodeando las huellas que dejo la esperanza en mi cabeza, la valentía desapareció junto con las ganas de seguir. decidir es mucho mas fácil cuando no existe propósito y en estos momentos tan sólo anhelo esperar.

La Dulce Caída.

Y si no encuentro palabras para expresarme, y si no veo la luz al final del túnel y si no logro respirar al llegar al vacío? como pretender que todo sigue igual si mi alma se encuentra sedienta del suave manantial de la compañía, intentar callar mi ansiedad es como ahogarme en el mar indomable de la soledad, es limitarme a sentir solo lo recibido y dejar a un lado lo indispensable, es querer vivir sin tropiezos y avanzar hacia la horrible morada del abismo. Intentar cambiarme es perder lo mas valioso, perder la dulce caída al equivocarme.

El Sendero Equivocado.

Huyendo de la realidad próxima, mis miedos me cautivan en un lugar oscuro en donde no hay cabida para mi lamento, mis pasos son reconocidos por el camino mientras que para mis ojos todo se torna familiar, la debilidad que me domina hace caso omiso a la poca valentía que se asoma en un deseo de no repetir la historia, la misma que comenzó con un negarme a la posibilidad de ser y sentirme mejor, ahora la poca luz que veo es opacada ante la oscuridad que tengo por morada, las palabras claudican en medio del basilar de mis labios, encuentro recuerdos de sonrisas que ahora se encuentran vacías y la fe que mi corazón clama está llena de dudas e interrogantes, la agonía se ha vuelto mi mejor compañía gracias a la despreocupación que me alienta a caminar por el sendero equivocado, un sendero que, aun sabiendo hacia donde me conduce no logro apartarme de su destino.

Lejos de Ti

Sin lograr comprender lo que mi mente evoca, veo un millón de sensaciones unidas a un mar de recuerdos que hoy buscan un cauce de olvido; logro encontrar tu sonrisa tan distante a la mía, tus brazos abiertos hacia mi y yo con ganas de huir, de ver por fin algo mas que no sea tu rostro, tu mirada fulmina lo que pude sentir, te veo y no lo creo, te siento y no lo deseo, tal vez un día logré confundir la conformidad con amor, pero hoy entiendo que no es amándote que soluciono el problema, es amándome que logro llenar mi vacío, es tratando de entenderme que atravieso las bondades de mi ser para vivir por los demás y poder así decir que mi soledad es el regalo mas hermoso que me dejo tu ausencia, gracias por desistir, gracias por partir, se que no comprendes y tampoco pretendo que lo hagas, sólo necesitaba decir que mi felicidad, mi sonrisa y mi aliento para seguir lo descubrí estando lejos de ti.

A través del Cristal.

Contemplando la luz que se cuela por una ventana, desvanezco poco a poco ante la realidad que por medio de la misma logro ver, voy encontrando que muchas veces vivimos nuestra vida así, a través de una ventana tan sólo dedicados a observar, pero donde queda esa realidad? Nuestros ojos se hacen cómplices de la injusticia y el dolor, mientras que nuestras manos quedan como ignorantes ante el sentir ajeno ¿cómo logramos llegar a estar tan sordos ante los gritos del silencio y todavía hacer pretender que amamos? es como hablar de ternura y vivir sumergidos entre los escombros de la vanidad. Hoy anhelo ver más allá de este cristal, inventar un modo para atravesarlo y que mis manos por fin logren sentir tu dolor, que tu calidez inunde mi corazón de cercanía y mis ojos consigan palpar el amor que, junto a mis pies, voy en busca desde hoy.

¿A Quién Buscas?

Mujer ¿a quién buscas? Jesús con esa simple interrogante hecha a María Magdalena cerca del sepulcro (Jn. 20, 15) ha marcado nuestra vida entera. Pasamos la vida creyendo saber hacia donde vamos, caminamos seguros sin conciencia de porque lo hacemos, otros por el contrario prefieren quedarse sentados pensando hacia donde ir, pero nunca nos hacemos las preguntas mas importantes que aclararían tantas dudas… ¿Qué quiere el Señor de mi? ¿Qué busca el Señor de mi? ¿Qué espera de mi? Ciertamente somos libres de dar cualquier paso y nunca estaremos convencidos si es el paso correcto, tan sólo el tiempo nos dará esa convicción, saber que hay errores que nos llevaron a hacer grandes cosas es reconocer que la piedra que hoy me hizo tropezar, mañana me ayudara a alcanzar tesoros que creí inalcanzables, es hacer las cosas bien porque hay alguien que nos observa y tiene su mirada fija en nuestro corazón, es saber que puedo hacer cualquier cosa pero de todas las opciones escojo ser bueno, diferente, sin alejar mi mirada del necesitado, sin olvidar que es una sola vida, que indudablemente hay muchos caminos pero sigue siendo tan solo una vida, elige bien porque cada decisión es trascendental, no para los demás, sino para nosotros, para ti que decidiste leer esto, para ti que te has mostrado capaz de crear un nuevo destino ¡atrévete a ser diferente! y a cruzar un camino en el que sin importar el error, logres agradecer la gracia de poder recorrerlo y así no tendrás que preguntarte hacia donde vas y que buscas? Porque sencillamente… ¡ya lo sabrás!